Por diversos motivos no había coincidido estar en Madrid en esta época y por fin, este año tocó. Al principio tuve mis dudas por la cantidad de gente que la corre, esto es como cuando Paco Martínez Soria llegaba a la ciudad y le preguntaba al guardia que cuando cruzaban la calle los de su pueblo.
Al final el oráculo me dijo cariñosamente que me dejara de gilipolleces y que nos apuntáramos juntos para correrla y como es costumbre, tengo que agradecerle sus tiernos ánimos.
La Sansil merece la pena como espectáculo, al menos hacerla una vez, no se como habrá quedado el Mapoma reconvertido a Madrid Rock&Roll pero cuando lo corrí, la verdad es que esperaba el espectáculo que vi en en la Sansil.
La carrera es lo de menos, una cuesta inicial y otra final y el resto to'pabajo, el objetivo no es correr es compartir la fiesta, otro año me disfrazo de bombero con manguera fijo. Hay música en vivo cada 2,5kms, la espera para el inicio está amenizada con pantallas gigantes, la organización funciona bien para la cantidad de gente que es, gente animando a patadas. Es cara, por que no se puede decir que sea barata pero como digo, como experiencia merece la pena.
Eso sí, no se si fue cosa de los organizadores, pero el frío sobraba, la próxima vez más calorcito señores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario