jueves, 20 de marzo de 2014

Corriendo por Regent's Park

Esta semana por motivos de trabajo me ha tocado desplazarme a Londres, como siempre en mi maleta caben todas las buenas intenciones del mundo y así entraron también las zapas y la indumentaria para correr.





Mi intención era correr dos días, y comer y beber moderamente, pero al final del primer día ya me había saltado la premisa del comer en base a la ingestión masiva de galletas de mantequilla y me descubrí de repente con una copa de vino en la "reception" organizada después.

En un arranque de ética me terminé la copa, educación ante todo, y me tambaleé hacia el hotel al ritmo del "Asturias patria querida". Nada, un lavado de boca y a la calle, a dar vuelta al Regent's  Park, eso sí antes de llegar casi consigo seer atropellado en todas las calles, no es posible hacer caso del "look left" y "look right" y mirar si el GPS sincroniza de una vez y al tiempo subirse las puñeteras mallas.

Ahora que lo realmente agradable fue descubrir que la zona de Regent's Park es PLANA, no lisa, PLANA, sin esfuerzo a ritmo de 4:50 (un poco más pero las historia es mía) y encima, hay muchísimos corredores, es increíble la cantidad de gente que corría, también ciclistas por todos lados. El caso es que de la masa corredora el 80% son mujeres, ahí es donde te das cuenta de lo atrasados que estamos en España.

Bueno, el caso es que cayeron 10 km muy agradables y para mi vergüenza tuve que usar la función mapa del GPS para orientarme para volver a casa, y es me das tres vueltas y ya no sé donde estoy. Soy el corredor de montaña ideal, gordito, con vértigo y me pierdo en casa.

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